Dos meses después de entregar la primera eSwingo 200+ a la ciudad de Thun en Suiza, quisimos saber cómo se desenvolvía esta máquina en la práctica. Nos permitieron acompañar al inspector de mantenimiento Andreas Trösch durante un día de trabajo con la eSwingo 200+. Nos confirmó que la máquina era muy silenciosa, tanto en la cabina como durante su uso en el centro de la ciudad y en las zonas de recreo. En caso de duda, el nivel de ruido puede incluso medirse. Pero también cabe señalar un factor interesante que no se puede medir directamente. Cita del vídeo: «Me siento un poco menos estresado, sobre todo por la noche. Noto que estoy un poco más relajado que cuando circulo todo el día con el motor diésel ».
Mucho más que un bajo nivel de ruido
El nivel de ruido de una eSwingo es de 91 dB(A), mientras que el de una Swingo convencional accionada por diésel con paquete de reducción de ruido es de 99 dB(A). Una reducción de 3 dB(A) de presión acústica se traduce en una reducción a la mitad del riesgo de déficit auditivo. Una reducción de 10 dB(A) de potencia acústica se traduce en una reducción a la mitad del volumen. El nivel de ruido de la eSwingo se sitúa, por tanto, prácticamente a la mitad que el del modelo diésel.
No obstante, para lograr un lugar de trabajo agradable, no solo es importante el ruido, sino también la ergonomía en su conjunto. La ergonomía comienza con el diseño de la cabina y el concepto de manejo. Cuanto más accesibles sean los elementos de mando y más intuitivo sea el control de la máquina y los equipos, menor será el estrés que sufra el operador. Y un menor estrés se traduce en más seguridad y, en definitiva, en una mejor salud laboral. Pero para lograr un lugar de trabajo de diseño ergonómico también son importantes muchos otros factores. Por ejemplo, que los elementos individuales estén diseñados para cuidar especialmente de la espalda. Esto comienza con el acceso al vehículo, continúa con el asiento del conductor y termina con la colocación a una altura razonable de las toberas de llenado y de otros elementos de la máquina que se accionan con frecuencia.
Certificado por expertos independientes: el sello de calidad «AGR» para productos que contribuyen al cuidado de la espalda
La asociación AGR se fundó en 1995 con el objetivo de reunir los diferentes conocimientos médicos sobre dolencias de espalda de distintas especialidades y así poder informar, clarificar y, sobre todo, ayudar a los afectados. La asociación colabora estrechamente con las asociaciones profesionales médicas y fomenta la prevención o, al menos, el alivio del dolor de espalda por medio del uso de productos de uso cotidiano que han sido sometidos a pruebas y a los que se ha otorgado un sello de calidad. Todas las barredoras compactas Schmidt llevan este sello de calidad. En el vídeo encontrará información precisa al respecto.